En estos días, ha salido a la luz las irregularidades en la licitación de la obra de Portezuelo del Viento. Sectores empresarios se manifestaron por la suspensión de la licitación al advertir condiciones imposibles de cumplir para la mayoría de la empresas locales, favoreciendo a una sola empresa, IMPSA, que fue la única que pudo comprar el pliego. Pliego que, curiosamente, fue armado por un funcionario provincial ex CEO de esa empresa.
Portezuelo del Viento, una megaobra hidroeléctrica sobre el rio Grande (U$S 1.000 millones) que aportaría al turismo y al sistema interconectado nacional, generando electricidad como para abastecer a 130.000 hogares, pero que se encuentra cuestionada por sus consecuencias ambientales y sobre la trashumancia en la zona y por provincias vecinas, dado que el Rio Grande junto al Barrancas forma el rio Colorado interprovincial, ahora aparece sospechada de corrupción.
Pocos días después de que entra al Senado, por iniciativa del senador Marcelo Romano, una solicitud de aclaración sobre dicha Licitación, aparece desde el oficialismo el tratamiento en comisiones del pedido de desafuero, alentado por el ex gobernador Cornejo según aparece en medios locales, contra el senador Romano, por un altercado en 2019 con la policía, debido a un problema de tránsito.
Es conocida la posición y la actividad concreta en defensa del agua y de la Ley 7722, del Senador Romano y genera muchas preguntas la aparición casi simultánea, del pedido de desafuero fundado en una contravención, con la denuncia por la licitación de Portezuelo. Esto sin duda lleva a recordar la persecución de que fueran objeto, en diciembre del 2019 en plena lucha en defensa de la 7722, varios militantes de las Asambleas socioambientales nucleadas en AMPAP, sumado a la represión en Casa de Gobierno y posterior cacería por calles mendocinas por parte de la policía de Suarez, contra los miles de mendocinos que salimos a defender la vigencia de la Ley 7722, contra el saqueo megaminero, los negociados y la contaminación.
Esta costumbre del gobierno provincial de responder con medidas aleccionadoras, persecución política o represión frente a los reclamos populares, lo vemos en este pedido de desafuero a Romano, lo vimos en diciembre del 2019 y también hace un par de días en Guaymallén contra quienes enfrentan el hambre, agravado por cuatro años de gobierno de Macri y Cornejo, con ollas populares y merenderos en las difíciles condiciones de la pandemia del COVID 19.
Desde el Partido del Trabajo y del Pueblo, Mendoza, repudiamos este pedido de desafuero y brindamos toda nuestra solidaridad al Senador Marcelo Romano, entendiendo que esto es una nueva etapa de persecución contra opositores políticos y militantes populares. Exigiendo también una clara investigación sobre el proyecto, la licitación y las cuentas de la obra de Portezuelo del Viento.
Partido del Trabajo y del Pueblo – Mendoza